"No midas tu riqueza por el dinero que tienes o atesoras, mide tu riqueza por aquellas cosas que no cambiarias por dinero."

miércoles, 12 de octubre de 2011

El burén de Oscar

En San Cristóbal lloré. El humo que venía del burén de Oscar Pérez Salas me sacó abundantes las lágrimas, sin la más mínima dilación. Sobre una plancha de metal  en el rústico horno se cocinaba uno de los alimentos heredados de nuestros aborígenes: tortas de casabe.
Este trabajador de la Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) de San Cristóbal, asentamiento poblacional  del municipio de Jesús Menéndez, al norte de Las Tunas, aprendió la antigua técnica en la Empresa de Semillas de la vecina provincia de Holguín y seis años después beneficia a los vecinos con este alimento realizado a partir de la yuca rayada.
Entre 75 y 85 tortas de casabe son elaboradas diariamente por este hombre que confiesa que lo más difícil para él es tener que soportar el humo y el calor que genera su quehacer al que dedica su total atención desde las 6 de la mañana hasta las 2 de la tarde.
 A pesar de que su hijo no seguirá sus pasos en la tradición de hacer el casabe porque es maestro en la comunidad, ya asegura la continuidad del conocimiento con otros miembros de la cooperativa quienes potencian la siembra de la yuca para tener materia prima durante todo el año.
En Chaparra, cabecera municipal, le agradecen mucho a este productor y reciben con buen gusto el alimento que comercializan en la feria local los fines de semana con gran demanda, lo que genera ingresos para la cooperativa y para el elaborador, quien percibe un salario en dependencia de la venta.
Aunque el casabe era elaborado por los pobladores originarios, en muchos lugares de Cuba existen personas que nunca lo han probado; se produce preferentemente  para fin de año, cuando tiene especial relación con las costumbres de consumirlo con la tradicional carne de cerdo asada.
A pesar de que el trabajo no es nada fácil, con Oscar la técnica de hacer casabe está segura en San Cristóbal, donde le va bien al calor de su burén.

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